
¿No te ha pasado que vas a visitar a los agentes inmobiliarios y parece que hablaran en su propio idioma? Eso términos a los que ellos están acostumbrados en su día a día parecen imposibles para nosotros, pero cuando llega el momento de comprar o vender una propiedad, necesitamos estar al nivel de ellos para llegar a un buen acuerdo y evitar reprocesos. Estos son los términos que vas a escuchar más seguido y que necesitas conocer:
Lo más básico: qué es el sector inmobiliario.
La definición más simples de decir que es la oferta y demanda de inmuebles, es decir, casas, locales, edificios, etc. De ella, se desprenden los siguientes términos que vas a aprender hoy.
Inversión.
Aquí, el sector inmobiliario tiene como propósito vender las propiedades con el fin de que sus compradores obtengan ganancias gracias a ellas durante un tiempo determinado, bien se poniéndola en alquiler o remodelándola para ponerla en venta nuevamente a un precio más elevado.
Cédula de habitabilidad.
Para vender cualquier propiedad, con el fin que sea, debe existir este documento, en el que certifica que la vivienda cumple con todas las normas establecidas para asegurar que una persona puede vivir dentro de ella.
Tasación.
Supongamos que ya cuentas con los documentos necesarios, pero a los posibles compradores también les es importante conocer el valor real del inmueble. Para eso se realiza la tasación, en la que un profesional se encarga de estudiar la propiedad y definir su valor, y con esto, le permite planear al comprador su financiación.
Préstamo hipotecario.
Los agentes inmobiliarios han encontrado al comprador ideal y él, con la tasación, se ha dado cuenta que necesita ayuda para pagarlo. Para esto se solicita un préstamo hipotecario usualmente a una entidad bancaria. Con esto, en el documento se pacta el valor a prestar, el cobro de intereses y las cláusulas en caso de que haya incumplimiento de pagos.
Plusvalía
Ahora, el comprador quiere volver a poner a la venta esa propiedad. Pero antes de eso, la administración y el mismo propietario se han encargado de invertir en este terreno, con lo que han conseguido que la casa sea más valiosa que antes y les de más ingresos. Esta es la plusvalía.
Subrogación
Si esta persona encuentra rápidamente a su nuevo comprador, pero aún no ha terminado de pagar la hipoteca, se hace el proceso de subrogación en el que se cambia ante el banco el titular del préstamo. En otros casos, existe la subrogación cuando el mismo usuario quiere cambiar de entidad bancaria con el fin de mejorar las condiciones del préstamo.
Esperamos este ejemplo haya sido de gran ayuda para resolver tus dudas del sector inmobiliario. Próximamente tendremos más términos para que sigas aprendiendo de esta industria y sus beneficios.